Quilmes: murió el niño de 8 años que se le cayó un arco de handball encima

Benicio Farji había sufrido muerte cerebral luego de un fuerte golpe en la cabeza ocurrido el martes pasado. Argentino de Quilmes, donde jugaba al básquet, confirmó este jueves el fallecimiento y suspendió las actividades hasta el lunes.

El Club Atlético Argentino de Quilmes informó este jueves la muerte de Benicio Farji, integrante del plantel de básquet infantil de la institución. El chico había sufrido heridas de gravedad el martes pasado, luego de que se le cayera un arco de handball en la cabeza.

A través de un comunicado oficial dirigido a sus asociados, el club expresó: “Acompañamos en este difícil momento a sus familiares, amigos y compañeros, expresando nuestras más sinceras condolencias por la irreparable pérdida de Benicio Farji. Q.E.P.D.”.

El desenlace de este trágico episodio conmocionó a la comunidad de Quilmes y generó un profundo pesar entre quienes conocían al joven deportista. Todo comenzó en la noche del martes, cuando un accidente ocurrido en una cancha polideportiva de Argentino de Quilmes alteró la rutina del barrio y encendió las alarmas entre padres y allegados. Además, indicaron que, en señal de duelo, se resolvió la suspensión de todas las actividades hasta el lunes 3 de noviembre inclusive.

Pasadas las 21, el niño de 8 años ingresó por la guardia del Hospital Isidoro Iriarte en estado crítico, con lesiones cuya gravedad quedó expuesta tras los primeros diagnósticos médicos.

Benicio, alumno del colegio Nazareth, participaba de una actividad grupal en las instalaciones de la entidad cuando ocurrió el accidente. Según testigos, uno de los chicos intentó treparse a un arco de handball. El elemento, al no encontrarse debidamente amurado al suelo, cedió y cayó sobre él, generando un impacto directo en la región occipital de la cabeza.

La fuerza del golpe desencadenó consecuencias severas: traumatismo craneoencefálico, hemorragia otorrinofaríngea y un episodio de paro cardiorrespiratorio que requirió intervención médica inmediata, según le indicaron a Infobae.

El niño fue sometido a estudios tomográficos, los cuales confirmaron la presencia de graves lesiones craneales y hemorragia intracraneal, complicaciones que condicionaron de entrada el pronóstico.

En un intento por estabilizarlo, el personal médico identificó además un cuadro abdominal agudo, por el cual fue necesaria una cirugía de urgencia. La intervención en el quirófano del hospital quilmeño resultó positiva, aunque el cuadro general del paciente seguía siendo de máxima gravedad.

Ante la complejidad del caso, los profesionales resolvieron derivar a Benicio al Hospital de Alta Complejidad “El Cruce”, de Florencio Varela. El traslado se organizó mediante el Sistema Integrado de Emergencias de la Provincia de Buenos Aires, buscando ofrecer soporte vital y atención especializada.

Desde el ingreso al centro de alta complejidad, la evolución del niño se mantuvo bajo estricta observación. Información recabada daba cuenta de que Benicio permanecía internado con diagnóstico de muerte cerebral en esas horas.

El entorno familiar, la institución educativa y el club continuaron pendientes de la evolución hasta el desenlace fatal, que el club confirmó en la jornada de este jueves.